Los milagros son eventos que se perciben cómo prodigiosos.
La percepción del milagro cambia a medida que aumenta el conocimiento
y también a medida que pasa el tiempo.
Pero ellos, los milagros, estan siempre, no tienen fin
En un tiempo no muy lejano los eclipses, las estaciones del año y las tempestades eran considerados milagros.
Hoy parecen algo fácil de explicar, aunque nos siga impresionando como la naturaleza se desenvuelve
Otra sensación se produce cuando tomamos conciencia de que, con el paso de los años,
se convierten en prodigiosos milagros sin los cuales no seríamos lo que somos,
ni podríamos conectar los puntos precisos de plenitud y sentido a nuestra vida.
Actualmente sabemos muchas cosas e intuimos otras.
La ciencia y el progreso nos han permitido desarrollar la lógica, el sentido común e incluso el alma.
Somos capaces de concluir que la salud es nuestro estado natural
y que la energía para vivir
puede sacarse de las naranjas, los atardeceres, las algas, las flores, el amor,
los amigos, los libros, las estrellas, los poemas, los cuentos o las risas de los niños.
porque sabemos que dentro de nosotros laten infinitos recursos.
Y sin embargo percibimos que, no todo se sabe o está inventado.
o resulta explicable y verdadero.
Puede que la mente humana carezca de posibilidades para abarcarlo o que, por el contrario,
sea tan inmensa y extraordinaria que estemos sólo en los albores de su desarrollo.
Tal vez se trate de ambas cosas, o de ninguna, pero los milagros existen.
detrás de algo que se explica siempre puede surgir lo inexplicable
y detrás de algo que se sabe también hay algo que se ignora.
La sabiduría no es plena, aunque confiemos en ella para caminar por la vida
con una mínima sensación de certidumbre.
Aún no puedo explicar porqué me encontré ese dinero cuando más lo necesitaba,
porque el amor llegó en determinado momento......
Ignoro porque nos estremece un paisaje, una foto,
... inspirar el aire o despertar cada mañana...
Pareciera que todo es un milagro y nos da una maravillosa sensación de plenitud y agradecimiento.
Cuando nos conectamos a una sucesión de hechos,
que en su momento parecieron adversos o beneficiosos,
la vida adquiere pleno sentido y la clave de esos milagros no fue otra que creer firmemente en ellos.
Creer en lo que se desea, en la magia de cada momento,
el milagro sucede de una forma tan natural que parece haber estado allí siempre,
aguardando en el mudo silencio a que lo contacten
Hay una varita mágica en cada creencia
capaz de crear lo que uno cree.
Un hada madrina o un mago en cada uno de nosotros.
Por eso hablaba Einstein de dos formas de ver la vida:
"creyendo que no existen milagros y creyendo que todo es un milagro".
Saluditos Muyyyy Luminosos, lita
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